¿Es hora de volver a despertar tus papilas gustativas? ¿Estás curioso por expandir tus horizontes? Estamos muy entusiasmados con el té Pu-erh y el té Oolong, dos tipos de té que se encuentran entre el té verde y el té negro. Acá te contamos por qué nos han cautivado.
DESCUBRIMOS EL TÉ PU-ERH
¿Escuchaste alguna vez sobre algún té que tuviera las mismas características que un vino o un whiskey? Conoce Pu-erh, el té que se vuelve aún mejor con los años. Originarios del sudoeste de China, estos tés oscuros, que reciben el nombre por el mercado local de Pu-erh, están tan alejados de las preparaciones que disfrutas habitualmente como puedes imaginarte.
Las hojas se comprimen en tortas con forma de frisbee o bloques rectangulares planos y se dejan madurar durante varios meses (¡a veces incluso años!) Pu-erh es lo que se obtiene cuando se crea un té que usa el tiempo y la paciencia como sus ingredientes principales.
Debido a una fermentación continua, el té Pu-erh sigue cambiando con el transcurso del tiempo. Es casi como si estuviera vivo, con sus sabores en constante evolución a medida que pasan los años. Debido a que pueden madurar por décadas, se suele considerar a los discos de Pu-erh una herencia de familia que pasa de generación en generación.